He de confesar que hace un par de años no sabía gran cosa de caza y mucho menos pensaba que me podría llegar a identificar tanto con muchos de los valores que detrás de un cazador se esconden. Como en el mundo de la pesca, no es menos cierto que los mayores enemigos de nuestras aficiones los tenemos dentro de casa. Por eso, gente y marcas como Pedro de Ampuero y KUIU, con los que he tenido la oportunidad de trabajar estos últimos dos años, arrojan un rayo de luz al futuro de nuestras aficiones y como la sociedad las contempla, enseñando que el respeto por la naturaleza y la conservación están por encima de todo.
Os dejo un pequeño portfolio de algunas de los recuerdos de estos años en España, Rusia, Kazajstan, Turquia o Francia. Espero que os gusten.